martes, 22 de enero de 2013

Mi madre me dijo que, mujer perfecta no existe, entonces la dí un espejo.

Ahora no sé por donde empezar la verdad.

Despierto bien tu cara, tu sonrisa y tu dulce hablar. Tus buenos días curri, levántate que tienes que ir a estudiar. 
Lo bonito de todo es que nunca me abandonas, que siempre estás ahí , ayudándome , consolándome, haciéndome reír como nadie. ¿ Sabes mamá ? Te amo.
No porque seas mi madre solamente, si no por ser la mejor amiga y la mejor persona que he podido conocer jamás, te lo juro.  Eres increible hasta cuando te cabreas, eres tan especial.
Doy gracias a Dios y a papá por seguir teniendote a mi lado, conmigo, sin que te vallas como me abandonó papá.

Quiero que me abraces y que me prometas que nunca te vas a ir, que te vas a quedar para siempre conmigo , eres especial.

No te cambio por nada, ni mucho menos por nadie, eres el valor más incalculable que ni la calculadora podría calcular. No tienes precio, ni por muchos millones podría vender esto que siento por tí, te amo.

Cada momento contigo es algo nuevo, cada día es mejor, más te conozco, más te valoro y más pienso que eres el ejemplo a seguir como persona.

Debo darte las gracias por hacerme ser como soy, por conseguir hacerme llegar a la felicidad que tanto he esperado y que nunca supo venir, gracias. Gracias por cada beso, por consejos como esperar cuando yo más buscaba, por nuestras noches juntos en la misma cama, por secarme las lágrimas, hasta por decirme ese te amo que tanto nos encanta escuchar. Por los detalles que tienes conmigo, por las sorpresas que me haces, por levantarme cada día viéndote sonreír , por dar la vida por mi en cada momento de esta injusta vida.

Por todo y por mucho más y por lo que venga más adelante, gracias Venus.

TAD MAMÁ.

Buenos días princesa.

Buenos días princesa, he soñado toda la noche contigo.
Pensaba que no marcarías tanto a este corazón pobre, pero ya ves, lo hiciste, marcaste.
Me dieron las diez, las once, las doce y hasta las cuatro de la mañana, no logré pesar el sueño. Me hechizaste. No había forma en la mi corazón dejara de pensarte, pero ya ves, volviste a parecer.
No he logrado ver tu pelo en mis sueños todavía, pero si tus ojos y la mejor sonrisa que jamás nadie a dado al amor. Hoy o quizás mañana lograré que seas la princesa más destacada en este cuento a lo que llamamos vida, amor.